En la Península Ibérica, ya se comían antes de la invasión de América, hay constancia de que eran consumidas por griegos y romanos. Su procedencia varía según las fuentes, unas dicen que son originarias de China y otras dicen que de India y el este de África.
Lo que no cabe duda es que son deliciosas y grandes desconocidas para muchos, de según que regiones, y muy apreciadas por los extremeños por poner un ejemplo, dónde esta alubia es plato frecuente de la gastronomía local. Prueba de ello es que, cuando vamos a mercados fuera de Extremadura, los extremeños que aparecen por el puesto se ponen contentísimos y cargan bien de ellas, pues fuera de la región no es muy frecuente su venta ¡y menos tan buenas como las nuestras, vendidas a granel, y servidas en papel o en el tarro o bolsa del comprador!
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